Lanzamiento: Kae Tempest | The line is a curve
Su última referencia del 2019, The book of traps and lessons como Kate Tempest y su posterior revelación como persona no binaria para renombrarse artísticamente como Kae Tempest, le traen de regreso en esta nueva etapa artística con su álbum The line is a curve, material publicado por Republic Records y American Recordings. El apartado musical estuvo a cargo de el multi instrumentista y productor Dan Carey, Grian Chatten para el tema I saw light y hasta la leyenda Rick Rubin participa para el track More pressure. Dejando un apartado musical con mucho espacio, a veces orgánico, a veces electrico/sintético y con su toque progresivo que evoluciona tras lo resaltado de las vocales de Kae y colaboradores que aparecen: Confucius MC, Grian Chatten, Kevin Abstract y Lianne La Havas. Todos ellos completando y poniendo nivel que la dramaturga requería para este nuevo proyecto donde tendremos que manejan muchos sentimientos que pueden ir desde del amor, vergüenza, desillusion, ansiedad, que de cierta forma le obligaron a abrirse más y plasmar parte de ello en este álbum que viaja en muchos apartado por lo personal.
Un álbum completo que sale de la cuadratura actual dominante del rap UK y que propiamente Kae describe a continuación:
The line is a curve se trata de dejarse llevar De vergüenza, ansiedad, aislamiento y, en cambio, caer en la rendición. Abrazando la naturaleza cíclica del tiempo, el crecimiento, el amor. Es de esperar que este dejarse llevar se sienta en todo el registro. En la musicalidad, la instrumentación, el lirismo, la entrega, el arte de tapa. En la forma en que termina donde comienza y comienza donde termina. Sabía que quería mi cara en la portad. A lo largo de mi vida creativa, he tenido hambre de ser el centro de atención y me he sentido desesperadamente incómodo. Para el último par de discos, quería desaparecer por completo de las portadas de los álbumes, los videos, los aspectos frontales de esta industria. Mucho de eso se debió a mi vergüenza, pero lo enmascaré detrás de un deseo genuino de que mi trabajo hablara por sí mismo, sin que yo lo hiciera al frente, mercantilizando lo que me parecía tan raro y sagrado. A veces me molestaba que para poder hacer el trabajo, tenía que esforzarme. Pero esta vez, lo entiendo de otra manera. Quiero que la gente se sienta bienvenida en este disco, por mí, la persona que lo hizo, y he dejado de lado algunas de mis preocupaciones más aireadas. Me siento más conectado a tierra en lo que estoy tratando de hacer, quién soy como artista y como persona y lo que tengo para ofrecer. Siento menos vergüenza en mi cuerpo porque ya no me escondo del mundo. Quería mostrar mi rostro y soñé con que fuera Wolfgang Tillmans quien tomara el retrato.